Este verano, del 8 al 14 de julio, Cristina, Miguel, Candela y yo nos hemos marcado la travesía de los Alpes conocida como Alta Ruta Chamonix-Zermatt. El recorrido transcurre por algunos de los Glaciares y picos más impresionantes de los
Alpes y se realiza en siete etapas (aunque existen varias alternativas), se atraviesa las fronteras de tres países (Francia, Suiza e Italia)
(Las fotografías son mías y de Candela y los relatos son de Miguel)
Relato día a día del recorrido
Texto: Miguel
Fotos: Norberto
Protagonistas principales: Cristina, Candela, Norberto y Miguel
La etapas fuerón las siguientes (como se ven en la primera imagen):
1ª Le Tour- Refugio Albert 1º
2ª Refugio Albert 1º- Champex (anulada por mal tiempo).
3ª Mauvoisin- Refugio Chanrion
4ª Refugio Chanrion- Refugio Vignettes
5ª Refugio Vignettes- Refugio Bertol
6ª Refugio Bertol - Refugio Shönbiel
7ª Refugio Shönbiel- Zermatt
Se trata de una travesía por glaciares que une las dos capitales mundiales del alpinismo, y los dos más impresionantes macizos
de los Alpes, el del Mont Blanc y el del Monte Rosa y el Cervino.
No es un recorrido de trekking senderista, sino una ruta de alta montaña, que requiere equipo adecuado. No tiene dificultades técnicas, pero conviene ir con guía,
pues es muy importante evitar las grietas de los glaciares, y saber las técnicas de rescate en grietas si alguien cae en una.
Existen varias variantes del recorrido, se puede hacer en seis,
siete e incluso en cinco días para los más en forma.
Nosotros lo hicimos con los guías de
www.lepaysdh.club.fr donde podéis ver todos los detalles técnicos, precios, recomendaciones,
etc. También la Compañía de guías de Chamonix, la efectúa, por una variable un poco más exigente, y en seis días, ver detalles
en
www.chamonix-guides.com
Es una ruta maravillosa, que creo que hay que hacer al menos una vez en la vida. Para los esquiadores de montaña, la ruta
también se hace en primavera con esquís, con descensos memorables.
De todas maneras hay que tener en cuenta que todos los glaciares tienen grietas, por tanto hay que ir encordados y atentos.
Ruta General
Como veis, la ruta va casi siempre por glaciares, y tiene una ruptura al final del segundo día, que se llega a terreno civilizado en Champex,
lo que viene bien, ¡ es la única ducha de todo el recorrido!, y permite hacer compras y poner a punto el material si algo ha
fallado. Desde Champex, un precioso pueblo suizo a la orilla de un lago, un cómodo taxi-furgoneta nos llevó al principio de la
tercera etapa, el Lago de Mauvoisin
1ª Etapa: Le Tour – Refugio Albert 1º (2702 m)
Desde Le Tour, pueblo cercano a Chamonix, hay dos remontes, el Telecabina de Charamillon, (1.852m), y el Telesilla al Col de
Balme (2.167m.). Lo previsto era tomar sólo el primero, y subir al refugio desde allí, pues te sirve de calentamiento, y además
el camino tiene unas vistas magníficas del Macizo del Mont Blanc
al otro lado del valle, pero como hacía un día horrible, con niebla, viento, lluvia y amenaza de tormenta, tomamos también el segundo,
y en unas dos horas llegamos al refugio, por una senda que sigue la morrena de la derecha del glaciar.
Salida de Chamonix
Ya íbamos con todo encima para los siete días, y con la ropa técnica de montaña. Yo era el único que todavía llevaba botas de
plástico, tienen más de 30 años, y unos cuantos cuatromiles a cuestas, al final del viaje, casi llorando, las tiré. Los demás iban
con modernas botas de alpinismo de goretex, de última generación, adaptables para crampones rígidos, no sirven las
botas de trekking.
A pesar de que Chamonix está sólo a 1.040m.ya no sobraba la ropa…
Estación de Montroc
Aquí era la cita con el guía que no aparecía. Al final llegó más de media hora tarde. Se nos juntaron una francesa, Michelle y un
británico Christian, los dos de unos cuarenta años más o menos.
Parece que a estas cosas jovencitas de 18 años vienen pocas…, exceptuando a Candela y Cristina naturalmente…
El guía que no aparece…
Frente del glaciar de Le Tour desde Le tour
No sé como duermen tan tranquilos en Le Tour con esos hielos encima. Hasta el mismo pueblo se llega esquiando en invierno
Reparto de material y primeros consejos
Apareció el guía, Sebastián Laurent, de 32 años, buen mozo, con melenita, a las chicas les encantó… Nos riñó por llevar demasiadas
cosas en la mochila lo que las hacía muy pesadas, aparte nos dio los baudriers, arneses, y una cuerda…El guía es el de azul.
Telesilla al Col de Balme
Este es el final de la Telesilla al Col de Balme (2.167m), antes habíamos tomado el Telecabina de Charamillon. El tiempo era
malísimo, con lluvia, nieve, y amenaza de tormenta.
Subida al Albert 1º
Desde el Col de Balme, se toma una senda por el margen derecho del Glaciar de Tour, con vistas tremendas del glaciar, y cuando
hace bueno de los picos…, que en unas dos horas te lleva al Refugio Albert I (2.706m)
¡A mal tiempo, buena cara! Fresca como una rosa…
Vista hacia atrás del recorrido desde la morrena glaciar
¨
Únicamente los últimos 200 metros se pisa nieve, pues el resto se va por la morrena lateral.
Ya estamos muy cerca del refugio, que creo que incluso se ve.
Glaciar de Le Tour
Los glaciares pueden presentar aspectos muy diferentes, con hielo y grietas a la vista como aquí, o ser más traicioneros, y
presentarse como un gran campo nevado, pero las grietas están debajo, esperando a quién se tragan…
Mirando hacia atrás en el camino.
Refugio Albert 1º
Aquí están los dos artistas en el refugio antiguo, que es el que queda abierto en invierno, es de madera, y fue inaugurado en
1930 por el rey de los belgas, Albert I, que era alpinista, y que falleció practicando esta afición en trágico accidente en 1934.
Ahora hay un edificio nuevo, de piedra, un poco encima del antiguo.
En el mismo sitio, Cristina y yo.
El glaciar y algunos picos que se ven desde el refugio.
Entre tormenta y tormenta
Mirando hacia abajo, el camino que nos ha traído al refugio.
Interior del refugio
Los refugios son bastante acogedores, el problema es que estaban llenísimos, lo que los convierte en incómodos. El que está
comiendo es el londinense Christian que venía con nosotros.
2ª Etapa: Albert 1º- Champex (No se completó por mal tiempo)
La etapa del segundo día es espectacular, toda glaciar, primero se sube por el Glaciar de Tour hasta el Col Superior de Tour
(3.282m), allí se entra en Suiza por el espectacular Plateau Glaciar de Trient, se baja el Glaciar de Orny, y se llega al Telesilla de la
Breya(2.188m.), que te baja hasta el pueblo suizo de Champex.
No pudimos hacerla por mal tiempo, subimos por el Glaciar de Tour hasta los 3.000m. pero los truenos y el mal tiempo nos hicieron
desistir, y bajamos por el glaciar hasta los 2500m. y luego por camino hasta tomar el Telecabina de Charamillon, a 1850m.
Queda pendiente para otra ocasión.
Salida a las 6 de la mañana
Salimos tarde, pues hacía mal tiempo, y esperamos a que se arreglase algo.
Subiendo el puerto de Le Tour
Aquí nos encordamos y pusimos los crampones para subir por el Glaciar de Tour.
Como ya he contado tuvimos que dar la vuelta, y fuimos a Champex en el coche del guía.
Vistas desde el Albergue del Club Alpino Suizo en Champex
Resultó que el Refugio-Chalet del CAS de Champex, era un sitio idílico y paradisíaco al borde del lago, con magníficas camas
individuales con edredones suizos, una ducha calentita, un bar restaurante precioso, en fin, como para quedarse, habrá que volver.
Cena en el Refugio
Este era el bar-restaurante, muy acogedor, nos bebimos nuestras buenas cervezas y vinos suizos.
3ª Etapa Lago y Presa de Mauvoisin (1.964m) – Refugio de Chanrion (2462 m)
La tercera etapa fue suave, sin pisar nieve, por sendas con buenas vistas, aunque el tiempo no terminaba de aclarar.
Hasta la presa fuimos en cómodo taxi, en viaje de una hora, incluido, como los refugios, remontes y media pensión en el precio.
Embalse de Mauvoisin
Dicen que la presa es de las más altas de Europa, tiene 200 metros de altura.
Rodeando el lago
Como los refugios no tienen duchas, se ve que las ponen por los caminos…
Embalse y vistas de la zona de Grand Combin
Las vistas eran preciosas, pero lo más gordo, el Grand Combin (4.314m) y los glaciares se escondían entre nubes.
El camino transcurre entre prados alpinos, a veces llueve, y hasta nos caen copos de nieve. Vamos bien abrigados.
El artista Norberto luciéndose con su cámara.
En uno de estos prados paramos a comer los picnics que habíamos comprado en Champex, y conseguimos
sacarle algunas palabras al guía, que era más bien poco hablador.
Bajada desde el col de Tsofeiret a la salida del Glaciar de Brenay
Desde el Col había que bajar en picado, con cuidado, pero sin problemas, ¡menos mal que no había hielo…!
Ya estamos cerca del refugio, ya veis que lo de pantalones cortos y chanclas, aquí no se estila…
Si hubiese venido Bernardo, pues se hubiese hecho en el camino este barranco, total ya puestos…
Primeras Vistas de la Zona del Refugio, entre los dos lagos
Ya queda menos.
Glaciar de Tsessette en un lateral del Grand Combin
La pena que el tiempo no nos dejaba ver todos los picos y glaciares de cerca del refugio.
Refugio de Chanrion (2.462m)
Se trata de un cómodo refugio suizo, con buenos servicios, lavabos, agua corriente, todo en el interior, un lujo para lo
que nos esperaba en otros.
Interior del Refugio Chanrion.
Exterior del refugio, aunque parece muy pequeño, es un efecto óptico, era bastante grande. Charlando al atardecer antes de
dormir, se cena sobre las seis y media, y se duerme sobre las nueve.
Etapa 4ª Refugio de Chanrion – Refugio de Vignettes por el Glaciar de Otemma.
Magnífica etapa glaciar, en la que se remonta todo el largo glaciar de Ottema, calculo que lo recorrimos durante unos ocho
kilómetros, en un paraje salvaje y espectacular, aunque la niebla sólo nos permitió ver un poco a ratos los picos que lo flanquean,
por un lado las crestas que nos separaban de Italia, La Singla (3.714m), La Grand Blanche (3.678M), EL Petit Mont Collon, y por
el otro lado la cadena de Portons.
Al final se llega a un tremendo Plateau Glaciar y al Col de Chermotane, y se sube al refugio por fuerte pendiente de nieve.
Frente del Glaciar
Antes de poner pie en el glaciar, descendimos desde el refugio en su busca y lo bordeamos un rato por su morrena lateral.
El tremendo frente glaciar del de Ottema.
Preparándonos para atacar el glaciar.
Progresión por el Galciar. Vistas de La Singla y Petit Mont Collon
Ya en pleno glaciar, Candela y el guía Sebastien. Hacía mucho frío, íbamos con toda la ropa, era 11 de julio, y en Sevilla a 40º C.
Las chicas ya van por los glaciares como quien se pasea por la Plaza Nueva…¡aunque algo más abrigaditas!
El glaciar tenía poca pendiente, y había nieve polvo recién caída, ni siquiera necesitamos crampones aquí.
Llegada al Refugio de Vigentes (3.158m.)
Después de una subida vertiginosa, y de más de seis horas y media de marcha, paradas incluidas, llegamos al refugio,
encordados y con todo hasta la misma puerta.
Los famosos servicios de Vignettes
El refugio es precioso, está en un sitio espectacular, pero NO tiene agua corriente. Sus dos W.C., son famosos, están fuera, al
extremo de una pista de patinaje de hielo, y sobre un precipicio tremendo, todo va directamente al glaciar, parece que están de
obras para acabar con éso.
No sé qué banderas son, una debe ser del cantón suizo donde está el refugio.
Cena en el Refugio
Las cenas eran abundantes y buenísimas, ¡así no hay manera de adelgazar!
5ª Etapa Refugio de Vigentes (3.158m) – Refugio de Bertol (3.311m) Rodeando Mont Collon por el col de L’Eveque
y el Glaciar de Arolla
Etapa grandiosa. Aunque como se ve, el Refugio Bertol está bastante cerca en línea recta, hay que dar un gran rodeo,
dándole la vuelta casi entera al Grand Mont Collon, por todos sus glaciares, pues el otro camino es impracticable por grietas y precipicios.
Por primera vez tuvimos ¡Grand Beau! Como dicen los franceses, tiempo estupendo y soleado, y disfrutamos de lo lindo.
La etapa fue larga y dura, 1.149m de subida y 996 de bajada, pero atravesando parajes increíbles, casi todo el tiempo por
glaciares, y con vistas que te dejan sin habla.
Tardamos nueve horas y media, pero contando las paradas, una de ellas de más de hora y media.
Por fin buen tiempo. Ventana de la habitación de Vignettes (5 a.m)
A las 5h diana.
Comezamos la ruta. Vistas de Mont Collon
El Ëvêque, obispo, ( 3.392m), el Grand Mont Collon y glaciares, nieve y hielo, ¡y estamos en pleno julio!
Los servicios de Vigentes. Mont Collon al fondo
Llegan los víveres a Vignettes
Justo cuando nos íbamos, por si faltaba espectáculo, llega un helicóptero, yo creo que traía también a los obreros
de la obra de remodelación del refugio que había.
Naturalmente, Norberto no desaprovechó la ocasión y se lució con su cámara.
Salida por el glaciar del Pigne d’Arolla
La bajada al glaciar es en picado, hay mucha nieve recién caída.
Vistas de Vignettes (izquierda), Mont Collon (derecha) y la zona de Bertol (Centro) a donde nos encaminamos
Norberto se luce en estas panorámicas.
Bajada por la parte alta de Otemma
¡Aquí también hay grietas, aunque no se vean!
Vignettes, el Dent Blanche al fondo
No tengo palabras…
Paso por el Glaciar de Mont Collon, el col de L’Eveque al fondo
Había buena huella, varias cordadas por delante, las ventajas de salir tarde… ¡Dios mío, que paisaje!
Hay que ir con la cuerda tensa, y atento a si alguien cae en alguna grieta tapada por un puente de nieve.
En pleno glaciar, bajo la vigilancia del Obispo.
Vistas atrás
Subida al col
¡Todavía queda subida…!
Menos mal que vamos con el artista Norberto que capta estas maravillas.
La cordada avanza impasible.
Vistas desde el col (3382 m). Pico de Oren
Dan ganas de subir esa elegante arista, pero queda para otra ocasión.
Norberto se luce con esta panorámica en el Col de L´Évêque, con el Obispo, La Mitra del Obispo, La Virgen, parece que estemos en la Carrera Oficial, pero así se llaman los picos…
Bajada del col por el Glaciar de Arolla. Pasamos a Italia. El pico pqueño abajo al centro es la Virgen, al frente arriba
en el centro Mont Brulé, a la izquierda los Bouquetins
¡Llevamos unas pocas horas, y ella como nueva!
Bajando con cuidado por el glaciar.
Alto Glaciar de Arolla
Un descanso en el glaciar.
Posando cual modelo para el paparazzi Norberto.
Circo Glaciar con Mont Brulé al fondo
El artista en un descanso.
Estación meteorológica y de medida de espesor de hielo
Aquí los ingenieros se enrollaron explicándonos qué era cada cosa, que si esto mide el nivel de la nieve, que si esto otro el
viento; yo creo que era una antena parabólica de la comunidad de vecinos del glaciar…
Parte baja del glaciar, vistas sobre la parte trasera de Vignettes con el Pigne d’Arolla (derecha) y el glaciar de Mont Collon
Vistas atrás con Mont Brulé y el Circo del glaciar de Arolla
Plan de Bertol
Llegamos al plan de Bertol, ya se ve el objetivo (al menos con el zoom): el refugio de Bertol
Panorámica desde el plan de Bertol: Mont collon, Petit Mont Collon y Pigne D’Arolla
Cruce de caminos, nosotros siempre para arriba.
Ahí están los servicios de Vignettes, desde el otro lado
Con el zoom se observan los “cambios de color” en esa zona
¡Estamos como nuevos!
Glaciar suspendido de Mont Collon
No es muy recomendable pararse a comer debajo…
El grupo completo
Al fondo, más arriba nuestro objetivo de hoy, el Refugio Bertol. Aquí paramos más de hora y media, para comer, hidratarnos
y descansar. La foto la hizo Norberto con un trípode, ¡hasta eso subió!
Subiendo a Bertol. Morrenas laterales del Glaciar
Descanso en la subida
Ya está cerca el refugio, pero estamos destrozados…
Llegada al Col de Bertol y vistas al otro lado: Dent Blanche (o Dama Blanca según otros), punta del cervino y Dent D´Hérens de izquierda a derecha
Vistas sobre el Valle de Arolla con el Pigne de D’Arolla y el Mont Blanc de Cheilon al fondo
Punta del Cervino
Se asomaba sobre el horizonte nevado, era una maravilla, aunque el artista también cuenta.
Últimos peldaños y llegada a Bertol (3311 m)
Preguntamos por el ascensor, pero no había.
¡Vaya obra de arte, de arquitectura y de ingeniería! ¡Cómo lo habrán hecho?
Conseguido, Al fondo Cervino, Dent d’Hérens y delante Tete Blanche y Bouquetins a derecha
¡Mírenla, que fresca está, como nueva!
Interior del Refugio Bertol, es precioso, con ventanas con vistas a todos lados.
Pigne de Bertol
Al fondo Dent Blanche
Esta de la parejita la hice yo, bueno es un trío, que La Dame Blanche tampoco está mal…
Atardece sobre Bertol: Dent d’Hérens
Panorámica desde la terraza exterior de Bertol. Dan ganas de quedarse a vivir allí, aunque la ida al trabajo está complicada.
Bernardo, te está provocando…¿A qué esperas?
Este me lo pido yo. Le Dent Blancheo La Dama Blanca ¡Vaya pico!
Pigne d’Arolla y Mont Blanc de Cheilon
Vistas al valle de Arolla.
6ª Etapa: Refugio de Bertol (3.311m) – Refugio de Shönbiel (2.694m) por el Glaciar del Mont Miné,
subida a la Tête Blanche (3.724m) y bajada por el glaciar de Stockji
Nuevamente una etapa casi totalmente glaciar y espectacular, en la que además se culmina el punto más alto de la travesía,
la cima de La Tête Blanche, (Cabeza Blanca), de 3.724m., un espléndido mirador sobre casi todos los picos de la Alta Ruta.
Esta etapa presenta un tramo con cierto peligro, que es la bajada del agrietado Glaciar de Stockji, que aparte de las tremendas
grietas a la vista, tiene numerosos puentes de nieve sobre otras ocultas. En esta bajada, otro grupo tuvo un accidente,
cayendo su guía en una gran grieta más de cinco metros, pero fue retenido con la cuerda por los otros, y supo salir ileso,
aunque con el susto en el cuerpo. Nosotros, afortunadamente
no tuvimos ningún incidente.
En la etapa se suben 607m, y se bajan 1.224m. Nosotros tardamos nueve horas contando las paradas que fueron
abundantes y largas, pues hacía muy buen tiempo.
Amanece tras la Dama Blanca
El toque de diana para esta etapa fue a las 4h20m. El motivo de madrugar tanto es que los puentes de nieve se vuelven más
blandos y peligrosos con el sol, la nieve se pone más blanda e incómoda para andar, aparte de que las jornadas son largas, y
hay que evitar posibles tormentas por la tarde. ¡Además todo el mundo sabe que “A quien madruga, Dios le ayuda”!
Vista desde la terraza panorámica del fantástico Refugio Bertol (3.311m),, con las primeras luces, se ven el Dent Blanche,
el Cervino asomando su cima sobre el horizonte nevado, La Tête Blanche, (3.724m), objetivo de hoy, el Dent D´Herens,
y glaciares y nieve por todos lados. El refugio era un sitio tan maravilloso que daba pena irse, además eran muy amables, al llegar invitan a todo el mundo a un té de bienvenida,
y se interesaron amablemente por cómo nos había ido la jornada.
Antes de hacer pie en el glaciar hay que bajar unos setenta metros de escalas con pasamanos y rocas con cables,
pues el refugio está en un verdadero nido de águilas, sobre una roca dominando los glaciares.
Emplazamiento del refugio Bertol (3.311m). El cartero lo tiene complicado para llevarles las facturas…
Vista atrás desde el glaciar de Mont Miné (Monte Minado)
Este es el primer glaciar que teníamos que bajar ese día, dejamos a nuestras espaldas con pena el refugio Bertol.
El día salió magnífico, ¡Grand Beau!
Avanzando por el Glaciar
Tête Blanche y Tête de Valpelline al fondo
Aquí se ve que la huella hace un zigzag para evitar grietas, pero seguro que íbamos sobre alguna, aunque tapada por mucha
nieve. Norberto aparte de un artista, tenía que hacer malabarismos, pues estas fotos las hacía sobre la marcha,
sin parar, no sé cómo lo conseguía, pues yo bastante tenía con pelearme con la cuerda, los bastones, los tirones de los compañeros…
Dent Blanche.
Bouquetins al fondo
Teníamos buena huella sobre la nieve polvo, pues a pesar de los madrugones siempre salíamos de los últimos.
La foto de Norberto es espectacular, con esas sombras que parecen esculturas de Giacometi, que además es suizo…
Ya se ve La Tête Blanche, que no es el que aparece más cerca, sino el que asoma tímidamente por detrás y que es más alto.
Subida a la Tête Blanche
Buen juego de luces y sombras.
Vaya seracs, de cuando en cuando se caen, con un ruido tremendo.
Aquí el amigo Norberto ha hecho una foto verdaderamente de exposición, luces, sombras, el sol, el brillo de la nieve,
el zigzag de la huella, la cordada. Norberto, creo que tienes que ponerle el copy-right y venderla.
Col de Hérens en la cuerda de la Tête Blanche, Vistas del Monte Rosa, Cervino y Dent d’Hérens
¡Qué maravilla de día! Nos encontrábamos todos muy bien, el tiempo era magnífico, y las vistas… Como veis Candela va “sobrá”,
como para subirse el Dent D´Herens y la cara oeste del Cervino, que es lo que más se ve.
Subida a la cima
Últimas rampas de subida a La Tête Blanche, que eran bastante suaves, todo hay que decirlo.
Tête Blanche (3724 m)
Aquí el grupo completo en la cima de La Tête Blanche (3.724m.), a las 9h. El guía Sebastien Laurent es el de la derecha, y el británico
el que parece un oficial del ejército inglés de la época colonial en la India, o quizás está esperando un miura a puertagayola,
naturalmente en La Maestranza…Sólo nos faltó la botella de champagne y las copas de cristal, a cambio tuvimos el “te del
guía”. Estábamos muy contentos, y hasta emocionados. No sabíamos todavía lo que nos quedaba ese día…
Panorámica desde la cima: Mont Brulé, Mont Collón, Mont Blanc muy al fondo, Pigne d’Arolla, Mont Blanc de Chelion, Dent Blanche, Mont Durand, Cervino, Dent d’Hérens, Tetê de Valpelline…
Como se ve en esta fantástica panorámica, se trata de uno de los mejores miradores de los Alpes.
Preciosa foto, con Candela sonriente entre el Cervino y el Dent D´Herens, para enmarcar.
Aquí estuvo el Cluddis
El banderín del Cludiis en la cima de La Tête Blanche (3.724m.), esperamos que alguien lo lleve pronto a una cima más alta,
pero tendrá que sufrir…
Dent d’Hérens
Espectacular con sus glaciares suspendidos, y hielo y nieve por todas partes. Decidimos dejarlo para otra ocasión…
Esta foto me la enmarco yo, es la cruz de la cima de La Tête Blanche, con la oeste del Cervino. ¡Vaya foto!
Bajando por el col de Hérens. Vistas del Plateáu de Hérens
Entramos en el glaciar de Stockji
A partir de aquí, el Cervino ya no nos abandonaría, a veces nos mostraba su cara oeste, luego la norte, la este y casi todas sus
aristas. El glaciar de Stockji tiene bien ganada fama de ser el más peligroso de la Alta Ruta, tenía a la vista algunas grietas
tremendas, donde todavía se veían puentes de nieve parciales, así que por aquí íbamos muy atentos.
Dent Blanche y al fondo Ober Gabelhorn
Grietas del Glaciar de Stockji
Son muy bonitas, pero se tragan a unos cuantos de alpinistas cada año.
Bajando atentos. La verdad es que el guía demostró conocer muy bien su oficio, y nos llevó siempre por los mejores sitios,
en este glaciar abandonó alguna vez las huellas más grandes y nos llevó por otro sitio, mientras que el grupo que cayó su guía
fue por otro lado.
Glaciar suspendido del Dent d’Herens
Refugio de Carrel en la Arista Italiana del Cervino
Foto del Refugio Carrel (3.829m), en la Arista del Lion al Cervino, una de las vías más fáciles, el primer día se sube hasta el refugio,
y al día siguiente cima…Bernardo, también puedes subir por aquí. La foto está hecha con el zoom.
Oeste del Cervino
El Cervino (4.478m), nos mostró todas sus caras y aristas, esta es la espectacular cara oeste.
Cuerda Cervino – Dent d’Hérens
Monte Stockji frente al Cervino, nos salimos del Glaciar del mismo nombre para evitar el agrietado frente, bajando al Glaciar de Zmutt
El Cervino (4.478m), y el Dent D´Herens (4.171m), con algunos de sus glaciares.
Aquí paramos a comer y descansar en una morrena entre dos glaciares.
Panorámica desde Stockji
Un té en el camino
El Cervino, con el glaciar agrietado abajo, Candela y el guía. Nos comentó que todavía tenía mucha nieve el Cervino y
que no había comenzado la temporada de escalarlo, Ya la semana siguiente empezaron a subirlo.
Rios de nieve por caidas de seracs
De cuando en cuando oíamos ruidos tremendos y eran caidas de seracs, que formaban estos aludes preciosos, siempre que no te caigan encima…
Como Norberto era casi siempre el artista, esta es de las pocas en que se le ve.
Ladeando el monte Stockji
Bajada al Glaciar
Cuando ya creíamos que teníamos el día hecho, hubo que bajar en picado al glaciar, con alguna sorpresa…
Cristina y yo con el Diente de Herens, me he quedado yo con ganas de hincarle el diente al Diente…Esta foto la enmarcaremos.
¡Candela y Norberto, espero que ésta la enmarquéis vosotros!
La lengua glaciar que se ve es del Glaciar de Zmutt.
Al fondo en el lateral esta nuestro destino de hoy: Shönbielhütte y al final del valle el de mañana Zermatt
Zoom sobre Shönbielhütte
¡Vaya vista que tiene el zoom este!, está tomada del mismo sitio que la anterior.
Algunos rapeles
Esta era la sorpresita que nos aguardaba, bueno una de ellas. Mientras Cristina le preguntaba al guía dónde pongo el pie,
dónde la mano, etc., él, que era de pocas palabras le empujó, soltó cuerda y ¡“pá abajo”…! Era una pequeña chimenea, que quizás se podía destrepar, pero el guía ante todo anteponía la
seguridad, una caída tonta ahí no convenía.
El grupo desfilando por el lateral del Glaciar de Zmutt, con el Diente de Herens al fondo. Esta foto la hizo el guía.
Giramos para subir por el Glaciar de Shönbiel
Segunda sorpresa del día, había que subir otro pequeño pero empinado glaciar, en puro hielo, y luego trepar…
Salimos del glaciar para trepar por la morrena y subir al refugio
¡Vaya los huecos que se ven en el glaciar de arriba!
La sendita tenía guasa, no convenía resbalarse. El Cervino como siempre espectacular, y el artista Norberto luciéndose.
Siempre bajo la atenta mirada del Cervino, que no pierde detalle.
Por fin, después de nueve horas de recorrido, con las paradas incluidas, llegamos al refugio, estábamos bastante cansados,
pues el día había tenido de todo, pero muy contentos, como se ve por la sonrisa de Candela.
En el Refugio de Schönbiel (2.694m), celebrando el éxito de la jornada con buenas jarras de cerveza.
Es una pena que no salga Candela, que fue la fotógrafa. ¡Buena foto!
Panorámica desde Shönbielhütte
El refugio de Schönbiel es muy cómodo, tiene hasta una fuente fuera, donde pudimos lavarnos, se sube desde Zermatt sin nieve en esta época.
Atardece sobre la Norte del Cervino
Monte Rosa
Foto con el zoom de las principales cimas del Monte Rosa, que bien merece su nombre, desde el refugio Schönbiel.
Cervino y Diente de Herens.
7ª Etapa: Refugio de Schönbiel (2.648m) – Zermatt (1600m)
Última y suave etapa, todo bajada de 1040m., sin pisar nieve, unas tres horas, aunque el madrugón no nos lo quitó nadie, pues habíamos quedado con el taxista en Zermatt a las nueve, así que nos levantamos a las 4h30m. Es que el guía había quedado con otros clientes para iniciar la Alta Ruta en Chamonix a las 13h30m. ¡Este muchacho no para! Sin ducharse ni cambiarse otra semanita tremenda…
Amanece sobre el Monte Rosa
Norberto luciéndose con estos reflejos del Cervino en el agua.
Fauna y flora
El valle que nos llevaba a Zermatt.
Bajando el valle
El grupo al completo despidiéndonos del Cervino, por cierto ¿quién hizo la foto?
Esperábamos que apareciese Heidi de un momento a otro…
La senda era agradable, aunque los pies los teníamos ya hechos polvo…
Primeros signos de civilización.
Hórreos
Los llaman “mazouts”, y son como hórreos.
De cuando en cuando una miradita hacia atrás, despidiéndonos con pena de la Alta Ruta y del Cervino.
Esta es la famosa Arista de Hornli, la vía más normal y fácil hacia su cima. Justo debajo de un hombro rocoso que hay ya muy arriba,
hay un refugio sólo para emergencias, el Solvayhütte, a 4.003m., pero no se ve en la foto, quizás con el zoom se hubiese visto.
Naturalmente en la base hay otro refugio que es el punto de partida, el refugio de Hornli.
¡Adiós, hasta otra!
Bernardo, que te sigue provocando…
¡Ya llegamos!
Fin de la Alta Ruta, el centro de Zermatt, precioso, sin coches, maravilloso tanto en invierno como en verano,
que ya conocíamos de otras veces, y que en esta ocasión, con las prisas del guía no pudimos disfrutar.
Es un sitio recomendable, en verano para subir los picos del macizo del Monte Rosa, Breithorn, Cástor, Pollux, Liskamm, Monte Rosa
con todas sus cimas, etc. y en invierno para esquiar, se baja esquiando a Italia.
Aquí habíamos quedado con el taxista, todavía se asoma el Cervino a despedirnos. Nos quedaba volver a Champex,
donde teníamos el coche del guía, y luego a Chamonix.
Espero que las magníficas fotos de Norberto y Candela os acerquen un poco a los maravillosos terrenos que hemos recorrido.
Cuando se hace un viaje con ellos, el reportaje fotográfico excepcional está garantizado, casi no hace falta ni ir,
luego se puede ver todo en casa, y los pies sufren menos…
Sólo queda agradecer a Norberto y Candela el espectacular reportaje fotográfico, que además de sus dotes artísticas,
tiene muchas horas de trabajo, comprimiendo las fotos, juntando muchas para las panorámicas, ya sabéis…
Naturalmente os recomendamos la ruta, y estamos los cuatro a vuestra disposición para daros más datos o responder cualquier pregunta o curiosidad.
Hasta pronto.
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Esto se lo debemos en gran medida a Norber.
