Fue muy bien, de lujo
Llegamos al refugio de Poqueira poco después de mediodía del sábado y dimos un paseito por la cabecera del río.
Por la mañana salimos temprano en dirección a la loma del Mulhacén y llegamos a siete Lagunas. Desde allí subimos por el coladero. Hicimos cumbre y bajamos por la loma hasta la Hoya del Portillo. Fue una paliza encantadora.
Tuvimos que acelerar un poco el paso en la tarde por la formación de tormentas, al final nos pilló una de refilón.
Las fotos espectaculares, ya las vereis.
A recuperarse esa lesión, esos deportes de ciudad dañan seriamente la salud
