Estas navidades hemos hecho una escapa express de tres días + dos de viaje al Parque Nacional de Peneda-Gerês en Portugal.
Para los que no lo conozcais Peneda-Gerês es el único parque nacional de Portugal y hace frontera con Ourense, no tiene montañas escesivamante altas, el Nevosa con 1545 m es el más alto,
siendo el segundo más alto del Portugal continental, el mal tiempo hizo que no pudiéramos subirlo. Pero no hay mal que por bien no venga, pues aprovechamos para dar una batida general por este extenso y espectacular parque.
Os dejo el enlace por si quereis profundizar más:
https://es.wikipedia.org/wiki/Parque_nacional_de_Peneda-Ger%C3%AAs Usamos como punto de partida el hotel Carvalho-Araujo de Gerês, el cual recomendamos, por su ubicación, comodidad, relación calidad/precio y sobre todo la familiaridad de sus dueños (
https://hotelcarvalhoaraujo.com/?lang=es).
En esta época el parque estaba casi desértico, en contraste de los que debe ser el resto del año, sobre todo en verano, aunque mi recomendación es evitar esta estación.
Gerês además de ser el centro neurálgico del Parque, es conocido por sus aguas termales lo que atrae a multitud de turistas, pero ahora el balneario está cerrado.
Comenzamos visitando una de los puntos más conocidos, la Cascada del Rio Arado de fácil acceso (eso sí después de una espectacular carreterilla de montaña), nosotros lo completamos con trekking circular de unos 16 kms remontando el rio.
Pasamos primero por el mirador de Pedra Bela, desde donde se domina todo el Valle del Rio Caldo donde se encuentra Gerês y otros pueblos, el pantano Albufeira da Caniçada ideal para actividades acuáticas abajo.
Comenzamos el camino a la cascada
A unos 300 metros de la carretera hay un mirador para verla, nosotros bajamos con cuidado para buscar un mejor punto de vista:
Seguimos valle arriba por el Rio Arado
Estamos en el Prado de Teixeira donde hay un pequeño refugio. En ese punto abandonamos el río y retornamos por el sendero conocido como "Trilho dos Currais" que de seguirlo completo no llevaría hasta Gerês, nos salimos del cruze con la carretera Gerês-Ermida por la accedimos al inicio.
El refugio como se ve tiene "de todo"
Nos encontramos en el sendero este otro curioso vivac.
Caballos salvajes Garranos, autóctonos de esta zona y que campan por muchos puntos del Parque.
El día siguiente como seguía el mal tiempo decidimos recorrer en coche la parte occidental del parque:
No dirigimos primero a Campo do Gerês por una espectacular carretera panorámica:
Pueblo de Covide al fondo con las típicas terrazas (socalcos) de cultivo del lugar.
Miliarios en una calzada Romana.
La calzada sigue por el borde de la "Albufeira de Vilarinho das Furnas" donde se pueden ver más miliarios adentrándose en un frondoso valle.
Proseguimos al pueblo de Bufre donde ya vemos algunos de los famosos "Espigueiros"
Los bueyes pasean por doquier
Iglesia de Britelo
Llegamos a Soajo, famoso sobre todo por su conjunto de Espigueiros
Continuamos camino del Santuario de Ntra Sra. de Peneda pasando antes por el Pueblo de Rouças y otras aldeas
Santuario


Junto al Santuario hay una hospedería
Estamos ya casi de noche en el pueblo de Castro Laboreiro, la niebla nos deja ver poco de lo que se intuye unos espectaculares parajes, habrá que volver.
De vuelta pasamos un trozo de España pasando por el pueblo de Entrimo donde vemos la Iglesia de Santa María la Real.
Nuestro último día en el Parque recorremos el lado oriental
Primer punto nos hacercamos con un senderito de 1 km aprox a la cascada de Pincães
En navidad que no falten los acebos
Siguiente punto: el Ponte da Misarela, senderito de unos 600 m

Ahora vamos al pueblo museo de Paredes dos Rios ,con sus molinos.
Y por último ya entre niebla y con la noche encima llegamos al pueblo de Pitões das Júnias, que se merecía una visita, pero por tiempo solo fuimos a sus dos mayores atracciones: el Monasterio de Santa María das Júnias y la cascata de Pitões.
El monasterio esta en ruinas a excepción de la iglesia, lo que con el ambiente de niebla y oscuridad cobra un aire realmante misterioso acrecentado por la soledad del sito el día de hoy.
Se llega por un sendero de unos 300 mts.
Bajamos ahora a la cascada por un camino perfectamente acondicionado de unos 950 mts hasta el mirador, desde aquí nos salimos por un sendero un tanto complicado para bajar hasta el río donde estaba el auténtico espectáculo.
Por último ya de regreso a España pasamos la frontera junto al Rio Homen
En fin, solo hemos visto la punta del Iceberg de este maravilloso Parque, habrá que volver, queda mucho por ver: Los picos de montaña, senderos megalíticos, calzadas romanas, decenas de valles, rios, cascadas...
